La competencia económica significa rivalidad entre empresas que participan en un mercado aplicando sus mejores estrategias de manera que pueden minimizar sus costos, maximizar sus ganancias y así mantenerse activas e innovadoras.
Lo conveniente sería que las fuerzas del mercado fueran suficientes como para alcanzar los objetivos de eficiencia y bienestar, estimulando la actividad económica, la innovación, la asignación eficiente de recursos y en general la satisfacción y el bienestar del consumidor y del productor.
Sin embargo, el mercado no siempre alcanza estos objetivos.
La competencia económica beneficia tanto a consumidores, como a comerciantes y empresarios, ya que en un entorno de competencia, el éxito de los empresarios dependerá de las estrategias para atraerse el favor de los consumidores de bienes y servicios sobre otros, y la manera de lograrlo es ofreciendo mejores opciones que las de la competencia.
Los beneficios para el sector empresarial, sobre todo para las pequeñas empresas, también son importantes; ya que tenemos acceso a insumos más baratos y de mejor calidad.
De modo que sólo después de conocer estos conceptos teóricos podemos valorar el papel de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia que procura colocar el país en los niveles que demandan los nuevos tiempos.
Es de justicia destacar la loable labor que al frente de la entidad viene realizando Michell Cohen, y un pequeño equipo que no escatima esfuerzos para que República Dominicana no sólo tenga una moderna ley de competencia sino que se ponga en ejecución. Los actores públicos y privados debieran crear conciencia sobre el papel de esta entidad en el desarrollo de la nación.
Sin competencia
FUENTE DE INVESTIGACION: http://elnacional.com.do/la-competencia-economica/
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